El hombre dentro de la sociedad
se encuentra en constante relación con el medio ambiente, en el cual
existen múltiples factores que se combinan para generar en el ser humano
efectos favorables o desfavorables de acuerdo a su forma de vida. Cabe resaltar
que, dichos efectos pueden ser indicios de salud o enfermedad.
En este sentido, la salud es el estado de completo bienestar que
pueden presentar los individuos en el aspecto físico, mental, cultural y social en el cual se desenvuelven. Logrando
así alcanzar la calidad de vida, debido a que se obtienen las condiciones
idóneas para la salud. En muchas ocasiones se tiende a confundir que estar
saludable es no poseer ningún tipo de rasgo o síntoma notorio de enfermedad,
siendo ésta una definición errada del término.
La enfermedad se considera como la presencia de un agente inicuo que
afecta las funciones vitales del cuerpo provocando desordenes en el individuo
generado por causas externas o internas. Además, se presenta como un
desequilibrio entre los factores genéticos y ambientales.
Es importante resaltar que no existe oposición entre los términos
Salud y Enfermedad, sino diferentes maneras de adaptación del cuerpo con el
medio donde influyen los modos y estilos de vida como elementos de beneficios o
riesgos. Es decir, el hombre en la sociedad establece su modo de vida, siendo
éste las formas de actuación propias del individuo las cuales determinan el
estilo de los mismos.
En otro orden de ideas, la problemática de la salud ambiental es
competencia de todos, ya que el sector salud no puede resolver dicha situación
por sí sólo. Por lo tanto es necesario la colaboración de múltiples disciplinas
para controlar y prevenir los factores que perturben el ambiente y adversamente
la salud de las actuales y futuras generaciones.
En la actualidad, el ascenso vertiginoso de urbanismos traen como
consecuencias un cumulo de enfermedades, por el desempleo, viviendas precarias,
congestionamiento de vías, vicios, sedentarismo, mala educación, falta de
servicios, desechos tóxicos y domésticos fomentan la afección del ambiente y la
salud del hombre. Todo esto, representan factores de riesgo que atentan con la
salud ambiental.
Sin embargo, el individuo requiere de buena alimentación, correctos
hábitos de higiene, descanso, actividad física, viviendas dignas, buena
educación, distribución adecuada de recursos, trabajo, igualdad social y
conservación del ambiente para su desarrollo pleno y saludable. Tomando en
cuenta estos elementos positivos para el hombre, se obtendrá como resultado
cambios y modificaciones en sus modos y estilos de vida.
Lo cual se logrará a través de un diagnóstico oportuno para controlar
los factores de riesgo procurando la conservación y mejoramiento de la salud.
Asimismo se debe promover desde distintas disciplinas la salud y prevención de
enfermedades, y crear políticas sociales en las que se puedan concretar los
proyectos de vidas de las personas tomando en cuenta cada uno de sus intereses,
deseos y el contexto en el que se encuentren inmersas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario